Gatos. De casi cualquier color. Casi, pues los hay matizados
de azul o lila, mas verde no, salvo uno que soñé hace mucho. Las multicolores
son gatas siempre. Ellos son bellos, aunque puede ser preciso entender su faz.
Ellas son más transitivas a la hermosura.
[...]
Ante la mirada de un gato, la superficie del agua tranquila
se hace cóncava, en grado escaso pero mensurable.
Detrás del antebrazo, dos, tres, cuatro pelos largos
–vibrisas– como breves cejas, dan fe de lo incomprensible.